viernes, 25 de diciembre de 2009

Clos Dominic


Hace unos días tuvimos el placer de hacer una cata de cuatro de los vinos de Clos Dominic en el enogarage de Oscar. En el Tasta Porrera 2009 probamos algunos, y las sensaciones fueron muy buenas, de ahí el interés para probarlos con un poco más de calma.

Clos Petó 2007: Bonito y vivo color picota de capa media-alta, su paso por copa va tintándola de su color morado. En nariz nos sorprende inicialmente con aromas a chocolate, fruta roja, moras y balsámicos. Ha seguido evolucionanado hasta darnos regalices y torrefactos. Aun con margen de mejora, un vino muy interesante y ha tener muy en cuenta. Una RCP Excelente.

Clos Dominic Vinyes Baixes 2006: Color rojo rubí de capa alta. Nariz intensa, con predominio de notas herbáceas (rúcula), fruta roja y negra madura, floral (violetas) fondo balsámico, fresco, mineral, toques a tabaco, ceniza, cueros y animal mojado, ¿a cuadras?. En boca tiene un buen ataque, amable, cierto verdor, sabroso y con presencia a fruta roja en el retro. Un buen vino que nos abre las puertas de su hermano mayor, el Vinyes Altes!

Clos Dominic Vinyes Altes 2006: Color picota, opaco, de capa alta y lágrima densa. Aromas a acetona o lacas muy marcados. Poco a poco entran en escena los aromas a fruta madura, especiados, en forma de pimienta negra, torrefactos, ahumados, chocolate y vainilla. Su paso en boca es de ensueño, aterciopelado, sabroso, envolvente, estructurado, buena acidez que le aporta frescura, final largo y persistente. Taninos aun algo presentes, que con algo más de botella quedaran totalmente integrados. Una joya de vino!!

Clos Dominic Vinyes Altes Selecció Miriam 2006: Color picota de capa alta. Aromas a acetona muy presentes, lleva casi 2 horas decantado pero sigue bastante cerrado. Aparecen ligeros aromas a fruta negra muy madura y algo de torrefactos, pero los aromas inciales a acetonas o laca siguen predominando por lo que no podemos apreciar mucho más. Sedoso en boca, ciertas notas amargosas, equilibrado, taninos bien integrados, mineralidad muy marcada, persistente, un vino de trago largo, para acompañar, por ejemplo, un magret de pato. Creo que es el primer vino monovarietal de Cariñena que pruebo, y porsupuesto no va a ser el último. Un vino con un gran potencial y una producción muy limitada, me gustará probarlo de nuevo más adelante.