jueves, 6 de junio de 2013

Escapada a Reil-Mosel, Weinhaus Barzen


Este fin de semana pasado, una comitiva venida de diferentes partes de la península, nos hemos escapado a tierras germanas para conocer más de cerca a La Diva, Reil-Mosel ha sido el destino escogido, y no ha sido porque sí, en este pequeño pueblo de tan solo 1200 habitantes se encuentra Weinhaus Barzen, nuestra bodega fetiche en la Mosela. Llegamos el sábado por la mañana al aeropuerto de Frankfurt-Hahn, allí nos estaban esperando Alexander Barzen, su pareja Tina y unos amigos de la familia para llevarnos a todos a Reil. Antes de dejar las maletas en las habitaciones, paramos en la bodega, donde pudimos comer alguna cosa y poder brindar y degustar nuestro primer vino, un Riesling Brut 2011, burbujas refrescantes para darnos la bienvenida. Seguido vamos a las habitaciones para deshacer las bolsas y tumbarnos un poco antes de coger el autobús para ir a hecer un tour fluvial por el rio Mosel. A las 16:00 partíamos para coger nuestro barco donde no sólo nos esperaban unas espectaculares vistas, sino una cata de la añada 2012 de algunos de los vinos de Alexander Barzen:


"La añada 2012 fue marcada por condiciones un poco mas frias de lo normal durante la primavera y verano. El otoño nos ha brindado condiciones muy buenas con noches frias y días soleados no muy calurosos, logrando así una maduración de las uvas más lenta...Los vinos de la añada 2012 se presentan muy aromáticos, armónicos y realmente lo que marca la añada 2012, es la buena estructura mineral - podrian ser hermanos de la añada 2010!"


Riesling Trocken: Fue una vendimia tardía, con un invierno frío que le aporta al vino menos graduación de lo habitual pero más aroma y una mineralidad más marcada. Nariz franca con ligeras notas a flores blancas, paso en boca fresco y agradable, un vino sin complicaciones pero plenamente placentero.

Spätlese Trocken: Nariz más intensa que el anterior, notas cítricas y minerales, en boca muestra una acidez más suave de lo que me esperaba (comentario en positivo) y con un postgusto largo que invita a tomar otra copa, y otra, y otra...

Edition Alte Reben Trocken: Salido de las viñas más viejas de la bodega (unos 130 años historia), este vino ha sido envejecido ligeramente en barrica de roble y ha mantenido contacto son sus lias unos 6 meses. Nariz expresiva, notas cítricas, minerales y de flores blancas, en boca muestra una acidez brutal, pero sin estridencias, dejando al final sensación algo grasosa y con postgusto ligeramente marcado por ese trabajo con lias (vainillas). Una béstia parda con larga crianza en botella.

Spatlese Feinherb: Pasamos a vinos más afrutados (feinherb), donde la fermentación ha sido parada para dejar al vino un toque de dulzor característico (22gr/l). Nariz más bien golosona, notas a fruta amarilla algo madura y flores blancas, en boca es de vicio, con el punto justo de dulzura para que sigas tomando una copa tras otra.

Kabinett: Un vino del que te podrias beber botellas sin pestañear siquiera, rico, dulce pero con acidez suficiente para que no te despegues de la copa, fino y elgante en boca y con una frescura arrolladora.

Eiswein: Este vino es puro vicio y perversión, si lo bebes una vez ya no puedes dejar de hacerlo, 190gr/l, una bomba que por desgracia cada vez es más escaso y por consiguiente más caro.


A las 20:00 volvíamos a estar montados en el autobús camino al restaurante donde cenaríamos todos juntos...Antes por eso una parada de 20 minutos para poder ver y caminar por las estrechas calles de Bernkastel, un precioso pueblo que parece sacado de un libro de cuentos infantiles.



Llegamos al restaurante, donde nos esperaba un menú ya cerrado con anterioridad y un sinfín de botellas de Riesling, Barzen porsupuesto, sumergidas en una cubitera llena de hielo. Terminada la cena nos dirigimos andando hacia Weinhaus Barzen para terminar la noche con un poco de música y buen vino, para ello Alex había puesto a enfriar en una neverita más Riesling, vaya, barra libre, impresionante las botellas que llegamos a descorchar...Y para acompañar sus vinos una selección de quesos alemanes que el gran Fritz Lloyd Blomeyer nos preparó y explicó con todo tipo de detalle, la guinda del pastel, un final de noche para recordar.


Domingo por la mañana, desayunamos y nos encontramos todos de nuevo en la bodega para ir en grupo a visitar la viñas viejas (Alte Reben) que Alex tiene en la ladera del rio Mosel. A pie de viñas, y como no podía ser de otra manera, descorchamos un magnum de Alte Reben, esta vez un Trocken 2011, 130 años de historia en una copa, con el rio Mosel como telón de fondo, no hace falta decir nada más, apoteósico, un perfecto final de viaje.




Prost!

5 comentarios:

  1. Fantàstica narració...descripció !!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gràcies Carles, espero que en la pròxima escapada puguis venir, et vam trobar a faltar, a tu i al pòtul del Xavito ;D

      Una abraçada!

      Eliminar
  2. Molt ben explicat Pep!! Va ser un cap de setmana inoblidable. Gracias también a Alexander Barzen por el trato y el recibimiento y a Oscar Gallifa por la organización!!

    ResponderEliminar
  3. Hola Pep, lo has explicado todo muy bien y bonito en detalle! pero hay un errorrrr, Reil tiene 1200 habitantes, no 2000...seria un pueblo ya muy grande en Mosela! (ya`ciudad´)
    Carlos, a la proxima te apuntas!?
    Saludos desdel valle,
    Alexander Barzen

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Rectificado Alex, se me había ido un poco la mano.

      Un abrazo!

      Eliminar